San Charbel Makhlouf

Youssef Antoun Makhlouf (José Antonio Makhlouf), Nació en Beqakafra, Libano, el 8 de mayo de 1828; en 1851, a los 20 años ingresó como monje maronita, se hizo novicio y recibió el nombre de Fray Chárbel; a los 25años se consagró según la liturgia católica al Señor por los tres votos religiosos de obediencia, pobreza y castidad, esto con el objetivo de encontrar la perfección moral y espiritual. a la edad de 31 años se consagró como sacerdote el 23 de julio de 1859; Murió a los 70 años el 24 de diciembre de 1898.
Fue beatificado en 1965 y canonizado en 1977, por el Papa Pablo VI, siendo el primer santo en el Líbano.

Siempre puso en práctica lo que había aprendido de su maestro espiritual y profesor de Teología, el Beato Nemtala El Hardini, cuando le dijo : 
"Ser sacerdote, hijo mío, es ser otro Cristo. Para llegar a serlo no hay más que un camino: ¡el del Calvario! Comprométase sin decaimiento. Él lo ayudará". 

Oración

Dios, infinitamente santo y glorificado en medio de tus santos,
Tú que inspiraste al santo monje y ermitaño Charbel
para que viviese y muriese en perfecta unión con Jesús Cristo,
dándole la fuerza para renunciar al mundo y hacer triunfar desde su ermita,
el heroismo de sus virtudes monásticas: pobreza, obediencia y santidad.
Te imploramos nos concedas la gracia de amarte y servirte siguiendo su ejemplo.

Dios Todopoderoso, Tú que has manifestado el poder de la intercesión de San Charbel
a través de sus numerosos milagros y favores, concédenos la gracia (…)
que te imploramos por su intercesión.

Amén.

(Padre Nuestro, Ave María y Gloria)

Oración de San Ignacio - Alma de Cristo

Íñigo López de Recalde, conocido como Ignacio de Loyola nació el 23 de octubre de 1491 en Azpeitia, Guipuzcoa y murió el 31 de julio de 1556, fue beatificado el 27 de julio de 1609 por Paulo V, el 12 de marzo de 1622 fue canonizado por Gregorio XV, su principal herencia fue sus ejercicios espirituales y un método para el discernimiento de espíritus. 

En el año de 1540, el Papa Paulo III autorizó la Compañía de Jesús. Orden apostólica, supresión del coro, sacerdocio preparado y pobre, entre otras características. 

Cuando la Compañía de Jesús inició, los jesuitas podían dedicarse a cualquier tipo de apostolado, siempre que fuera A Mayor Gloria de Dios. En 1556 cerca de su muerte, los jesuitas miembros de la Compañía ya ascendían a más de mil. Y para el año de 1615, los miembros jesuitas habían ascendido a más de 13,000 y se establecieron por Francia, Portugal, Flandes, Polonia, Italia, España, Indias y América.

--- Alma de Cristo ---

Alma de Cristo, santifícame

Cuerpo de Cristo, sálvame

Sangre de Cristo, embriágame

Agua del costado de Cristo, lávame

Pasión de Cristo, confórtame

¡Oh buen Jesús, óyeme!

Dentro de tus llagas, escóndeme

No permitas que me aparte de Ti

Del enemigo malo defiéndeme

En la hora de mi muerte, llámame 

Y mándame ir a Ti

Para que con tus santos Te alabe

Por los siglos de los siglos. 

Amén

Virgen del Carmen

SÚPLICA PARA TIEMPOS DIFÍCILES

Tengo mil dificultades: ayúdame

De los enemigos del alma: sálvame

En los desaciertos: ilumíname

En mis dudas y penas: confórtame

En mis soledades: acompáñame

En mis enfermedades: fortaléceme

Cuando me desprecien: anímame

En las tentaciones: defiéndeme

En las horas difíciles: consuélame

Con tu corazón Maternal: ámame

Con tu inmenso poder: protégeme

Y en tus brazos al expirar: recíbeme

Amén  

Rezar tres veces el Ave María.

Los Sacramentos de la Iglesia Católica

Son 7 sacramentos que se definen en las etapas de la vida natural del hombre: nacer, crecer, reproducirse y morir.

• Estos sacramentos nos llevan a una vida de bien, para poder alcanzar la santidad.
• Nos hacen participar en la vida divina.
• Nos convierte en hijos de Dios.
• Hermanos en cristo.

Se dividen en tres; de iniciación, de sanación y de servicio.

Los sacramentos de iniciación:

Son la base de la vida cristiana y se celebran mediante;

- Bautismo 

- Confirmación 

- Eucaristía

El Bautismo es volver a nacer y ser hijo de Dios.

La Confirmación nos prepara para crecer y dar fruto.

La Eucaristía nos alimenta con el Espíritu Santo.

Los sacramentos de sanación:

Constituyen la curación del  cuerpo y el alma, y se realizan con la:

- Reconciliación o confesión

- Unción de los enfermos

Reconciliación o confesión es la recuperación de la salud espiritual al momento de enfermar el alma.

Unción de los enfermos como ser humano la vida llega al ocaso, morimos y debemos estar preparados. 

Los sacramentos de servicios:

Representan el compromiso con Dios a través de la comunidad eclesiástica y se festejan con:  

- Orden Sacerdotal

- Matrimonio 

Orden Sacerdotal en la vida se necesita de una autoridad que aconseje y de orden a la sociedad que vivimos.
Matrimonio, la mujer y el hombre desde el origen de los tiempos se han unido, esto ha formado el hogar y las familias.

Ahora ya sabes o posiblemente ya sabías que son 7 sacramentos, estos sacramentos están fundamentados en la Biblia, al leerla podrás encontrarlos, pero si quieres saber mas en este blog lo encontrarás, próximamente.

Salmo 6, Para Orar y relfexionar

En estos momentos en que la humanidad padece y vive angustiado por la pandémia del coronavirus y otras enfermedades, es importante pedir a nuestro Padre Celestial, nos cuide, nos proteja, nos dé fortaleza y la salud necesaria.

Esta es una invitación a orar y reflexionar el salmo 6, con fe profunda, pedir por nosotros, los seres queridos y la humanidad completa.    

Salmo 6

Señor, no me castigues cuando estés airado, no me reprendas cuando estés enfurecido; ten compasión de mí, Señor; sáname, que mis huesos se dislocan. Yo estoy totalmente deshecho; y tú, Señor, ¿hasta cuándo?

Ven, Señor, y sálvame la vida, sálvame, por tu misericordia, que entre los muertos no hay recuerdo de ti, en el abismo(Seol), ¿quién te puede alabar?

Estoy ya consumido de tanto sufrimiento; cada noche empapo yo mi almohada, inundo de lágrimas mi lecho. Mis ojos se consumen de dolor, se agotan entre tantos opresores. Lejos de mí, vosotros, agentes de maldad, pues el Señor escucha el grito de mi llanto; el Señor atiende mi súplica, el Señor acoge mi oración. Queden mis enemigos confusos, aterrados, y huyan al instante avergonzados.